Que tiempos aquellos (Por Serafín Martínez)
Fecha de publicación: Jun 05, 2012 10:16:29 AM
El título pertenece a la letra de una bonita zarzuela, pero después del ensayo del pasado sábado, me venían a la cabeza añoranzas y memorias de todo lo que significa el tener una banda de música en un pueblo.
Leyendo la revista que vio la luz con motivo del centenario de la banda, no puedo dejar pasar la ocasión de sacar algún párrafo de todo lo bueno que en ella quedó escrito.
En el artículo que habla del musical, está resumido lo que debe de ser una banda de música de pueblo, con todos los valores de los que tanto y tanto hablamos, y vosotros, algunos de ellos, los estáis manteniendo en la actualidad, y a mí me gustaría que en estos tiempos que nos está tocando vivir, sigamos mirándonos en el espejo que nos dejaron aquellas generaciones, para tratar de mejorar y progresar todo lo que se pueda.
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Ni tenían local, instrumentos malos, nada de profesores por especialidades, seguramente el maestro era el músico más aventajado del pueblo o mejor sabía transmitir el mensaje musical. Si querían tener partituras, se las tenían que copiar ellos, sacando el papel pautado de donde podían. El cambio como podéis ver es muy grande, sobre todo en lo referente al tema propiamente musical, todo el mundo sabe que en la actualidad disponemos de mejor instrumental, partituras, fotocopiadora, escuela consolidada, maestro que puede decir algo, instalaciones dignas y auditorio acorde a estos tiempos, por eso, si aquellos músicos de los años cuarenta, viesen todo aquello de lo que disponemos, se llevarían las manos a la cabeza y dirían:” Ay si en nuestros tiempos hubiésemos tenido algo de esto, lo que habríamos llegado a hacer”. Pero si no podían ni siquiera escuchar música, posiblemente en alguna casa hubiese algún aparato de radio y nada más.
Esa es la pura y dura realidad. Preparación debemos de tener la mejor que podamos, clases, escuela, conservatorio, instrumental y todo el material posible. ¿Pero iríamos como lo hicieron aquellos jóvenes, una noche después del ensayo a por un carro de leña?.
Ese es el mensaje de esta semana, que seamos capaces e intentemos mantener el espíritu de camaradería, saber estar y disfrutar todos juntos por ese arte que nos une, enriquece y nos hace más amigos. Pensarlo, meditarlo y veréis como somos capaces de conseguirlo.
ía así: “Allí se convivía y se creaba un auténtico ambiente de camaradería. En cierta ocasión, los músicos veteranos comprometieron a los más jóvenes de si eran capaces de traer leña, ellos pagarían un cordero para el almuerzo. Aquellos se marcharon una vez terminado el ensayo y a las siete de la mañana regresaban con un carro de leña. Los veteranos tenían ya el cordero preparado para comérselo y después del almuerzo hicieron un pasacalle por el pueblo para invitar a la gente a un baile en el musical.”Qué gran lección tenemos delante de nosotros, si queremos seguir con esos valores de convivencia, saber estar, pasarlo bien y disfrutando con lo que nos gusta:”la Música”.