Esto funciona, y bien (por Serafín Martínez Marz)

Fecha de publicación: Dec 28, 2012 11:36:55 PM

Después de leer la magistral crónica que nos ofreció el gran Quique, no tengo más remedio que intentar ponerle unas pequeñas pinceladas musicales a su obra.

Que la tarde de nochebuena, en vez de estar pensando en los fogones y en Quique Dacosta, te dedicases a ponerle letra y de la buena, a todo aquello que habías pasado el sábado anterior, es, de verdad, por lo menos para mí, motivo de satisfacción, y estoy contento al ver que todo aquello que intento transmitir, no se tira y mete en el baúl de los recuerdos, y muy al contrario, lo tenéis muy presente en el día a día.

Recordaste a la junta saliente por todo el trabajo realizado, así como esperamos de la entrante, tenga una continuidad en el proyecto comenzado. Solamente con recordar las palabras que nuestro presidente dijo en el escenario, ya creo está dicho todo, más claro, sencillo y cordial no se puede decir, por eso estoy tranquilo y seguro que estamos en buenas manos y con el futuro asegurado, en la parcela que a ellos les corresponde.

Desde el primer día os voy diciendo que si la junta se preocupa, el director trabaja todo lo que puede la parte musical y los músicos están comprometidos con la causa, el éxito está asegurado y la mejoría sin darnos cuenta irá llegando. Y por lo que estoy observando, es lo que nos está pasando.

Tuviste un recuerdo para tu colega el joven Mario. Desde aquí ya os digo, que siempre que sea posible, voy a seguir en esa línea de ir dando paso a nuestros jóvenes músicos, el cambio generacional está ahí, y si además somos una banda que se preocupa por la formación musical y cultural, es lo que debo de hacer y poner en práctica. Nadie debe de sentirse molesto por ello, si somos objetivos, pensaremos que es lo que toca, yque somos necesarios todos y todas, para ayudar a mejorar al vecino, aportar nuestra experiencia en el proyecto musical, siendo todo esto lo importante e interesante para ir logrando la mejoría que estamos viendo.

Creo hemos llegado a conseguir, centrarnos en cada momento sobre aquello que estamos realizando, por eso nos va cundiendo la faena, ya sea pasacalle, concierto o los buenos ratos de “ad limitum”. Claro que soy consciente y mucho más de lo que os podáis imaginar, que esos momentos de convivencia en armonía y sí musical, no debemos de perderlos, ya os dije que otros quisieran tenerlos, así que os animo a que lo que la otra noche observé y escuché, por favor no lo perdamos, pero eso sí, siempre tratando e intentando el hacerlo bien. Son como os dije el otro día, vuestras señas de identidad, que también hacen piña y de la buena. El ver juntos al mayor de la banda, con el educando del trombón a los hombros de Quique, son recuerdos para no olvidarlos jamás.

Bueno, me he ido por Cerromuriano y del tema musical no he dicho todavía nada. Pero Quique, lo resumiste tan bien, con tanto tacto y con verdades como puños, que solamente puedo decir las palabras técnicas que tú no has querido mencionar, porque saberlas y controladas las tienes. Pero ya en la plaza, en el primer Morenito de Valencia, me di cuenta que aquellos sonidos, ritmo, melodías y armonías estaban cambiando y dando un giro a mejor, llega Tercio de Quites y era para Quitarse el Sombrero, escuchándose casi todo, sin amontonamientos ni recortes en las frases, dejando salir la música con espontaneidad y elegancia. Yo me decía para mis adentros, pero aquí que está pasando, esta banda está cambiando a pasos agigantados. Las Dinámicas y Agónicas se estaban produciendo sin yo tener que decir ni una palabra. Por poner una crítica muy constructiva, y que seguro que lo llegaremos a conseguir, es llegar a mantener las alineaciones (distancias entre las filas) y llevar el paso bien llevado todos, controlado y con soltura.

Del concierto, solamente quiero comentaros, que cuando escuché que en las notas de afinación ya nadie se equivocó, comprendí que aquello ya iba a funcionar casi solo. Y es lo que pasó, parecía un escenario y una banda distinta, con nuestros nuevos atriles, timbales, batería, platos, gong, y otros instrumentos, ya solamente nos faltaba ponerle la guinda al pastel, que no era otra cosa que estar a la altura de nuestro flamante material , el intentar interpretar y sonar bien todo el repertorio que habíamos preparado. Y debo de reconocer que gracias al trabajo, esfuerzo y dedicación se consiguió. Yo he puesto mi granito de arena, pero los verdaderos protagonistas de esos “brotes verdes” habéis sido vosotros, con vuestra ilusión y ganas de hacerlo bien.

Solamente me queda felicitaros a todos/as, por el resultado obtenido, especialmente a Quique por esas líneas que magistralmente tan bien trazó, esperando que el año que viene, sigamos con la misma dinámica de trabajo, ilusión y superación que en este que acaba hemos llevado.

¡Feliz Año Nuevo y que todas nuestras aspiraciones e ilusiones se vean cumplidas!