Web oficial de BANDA MÚSICA TUÉJAR
El pasado jueves 29 de agosto, una representación de la Banda de Música de Tuéjar y algunos acompañantes, iniciaron un viaje de cuatro días por tierras manchegas. En esta ocasión el destino fue Talavera de la Reina en la provincia de Toledo. Llegamos a mediodía, a tiempo para echarnos una cerveza los más mayores, mientras los más jóvenes rastreaban todos los alrededores del hotel para ubicar tiendas, supermercados y bares cercanos. Tras la comida del mediodía y siesta reparadora, iniciamos a media tarde una visita guiada por los Jardines del Prado y la Basílica de Nuestra Señora del Prado. Desde el primer momento entendimos porque Talavera es famosa, desde hace siglos, por su cerámica. En esta primera salida, en los Jardines, ya vimos el templete donde haríamos días después nuestro concierto.
El viernes 30 madrugamos y salimos disparados rumbo a Toledo para realizar una visita guiada por la ciudad. La guía nos repartió a cada uno un auricular ( ¿de oro? ) y acompañó a la marea azul por la ciudad para ver entre otras muchas cosas: la catedral gótica, el Tajo y sus impresionantes vistas a la ciudad y su alcázar, los mazapanes y el barrio del Greco, donde pudimos analizar, sujetos por atriles de nuestra propia expedición, su cuadro más famoso El entierro del Conde de Orgaz. Repaso histórico de Reyes, nobles y acontecimientos. Del Toletum romano al TulayTula musulmán para acabar en el Toledo actual. Finalmente, Plaza de Zocodover, descenso por escaleras mecánicas y a toda leche partimos rumbo al Parque Temático Medieval Puy du Fou. En el Parque tuvimos la ocasión de ver espectáculos de todo tipo, a cada cual mejor, que, en definitiva, se resume en dos palabras al estilo Jesulín: Im-Presionante. Por la noche Traca nocturna y Pódium para el Sueño de Toledo. La mayoría dijimos aquello de… volveremos.
El sábado 31 por la mañana visita guiada por Talavera. Más nombres de reyes, nobles y acontecimientos históricos. Muralla y torres albarranas. Colegiata y convento. Museo de la cerámica. Cerveza y aperitivo, en la Plaza del Reloj. Por la tarde y con camisa hawaiana, ponemos rumbo a Casar de Escalona para refrescarnos y hacer el oso en los toboganes de Aguapark. Eso sí, con limitación de menos de 60 y más de 90 para algunos. Esa misma noche, cena amenizada por los tres Sudamericanos. Fiesta ibicenca para todos los públicos en Diverxa. Juegos, cerveza, cubata y agua con gas. Los más noctámbulos, escapada a la fiesta de la boda.
El domingo 1 de agosto, muy a nuestro pesar, se acabó. Conciertazo de pasodobles a las 10,30 h en el Templete de los Jardines del Prado y para terminar la marcha mora Sisco. Una representación del Ayuntamiento de Talavera, que acude como público, hace entrega a la Banda de un detalle cerámico, como recuerdo de nuestro paso por la ciudad. Ole tú. Para comer en el hotel a mediodía, si bien el primer día empezamos con un regular arroz chino, terminamos el último con un espectacular costillar que hizo más ameno el viaje de vuelta. Adelantamos la vuelta por Benagéber. Tras muchas vueltas y revueltas por el pantano y con una buena dosis de desodorante, que hace que casi tengamos que abandonar la Chelvana por la ventana, llegamos al atardecer a nuestro querido poblado.
En resumen, un viaje completo, espectacular e inolvidable, donde ha reinado la armonía y la convivencia entre niños, jóvenes y mayores. En definitiva, se han dado todos los valores que se transmiten en una Banda de Música: cultura, diversión y compromiso. Ojalá que pronto podamos montar alguna otra escapada terrestre o marítima. Lo que dicen los más veteranos, esto es hacer Banda.
¡Viva la Banda de Tuéjar!
Puedes ver más fotos del viaje a Talavera de la Reina en ese Álbum